Dora Isabel Sierra, Carmen Ocaña y Gracia Nieto son tres jóvenes aficionadas a la fotografía que se conocieron precisamente en un curso formativo. A raíz de conocer a una costalera de la Hermandad de la Coronación de Espinas de Ciudad Real, decidieron fotografiar paso a paso, desde la primera reunión hasta la salida penitencial, así durante 3 o 4 días "pegadas a ellas, donde vimos el ingente trabajo realizado por el grupo de costaleras de Santa María del Perdón".
De aquel ¿por qué no me haces unas fotos? ha surgido una exposición virtual, denominada 'Costaleras del Perdón, Ciudad Real 2024', que puede visionarse en el portal ‘costaleras del perdón (virtualartgallery.com) con unas 50 fotografías seleccionadas y distribuidas en tres salas en las que se muestra, de forma cronológica, el esfuerzo realizado por mujeres de distintas edades desde los ensayos en el guardapasos, la formación del costal, cómo se ciñe la faja, la igualá, las primeras salidas con el paso de día y de noche, el traslado y el día de la procesión.
"No sabíamos lo que nos íbamos a encontrar, pero cuando me acerqué a los ensayos me quedé impactada por la envergadura de esta tradición; se lo dije a Carmen y a Gracia para que entre las tres difundiéramos el ímprobo esfuerzo de estas costaleras", comenta Dora.
Esta muestra virtual, reconocen tanto Dora como Carmen, es como una exposición en sala física, "fue un arduo trabajo, hicimos cientos de fotos, había que hacer una selección, editarlas, montarlas, teníamos que darle un enfoque a la exposición, un hilo conductor donde se pusiera de relieve la trascendencia de la labor de las costaleras bajo el paso, hemos contado toda su historia a través de nuestras imágenes".
Tras la publicación en la plataforma, las fotógrafas han recibido muchas felicitaciones, también de las propias costaleras, capataces y la hermana mayor, "porque era la otra cara de la pasión cofrade, la que no se ve y no está tan expuesta". Desconocen el número de visitas, "es un espacio gratuito pero si quieres estadísticas tienes que pagar", apuntan. Los costaleros de la hermandad ya han pedido ser ellos los protagonistas el próximo año.
Tanto Dora, como Carmen y Gracia están satisfechas de haber puesto en valor un trabajo poco reconocido, que este grupo de costaleras lleva con total discreción y sin reconocimientos, "es impresionante la labor que desarrollan, el peso que cargan, que me parece brutal, la maniobra de rodillas de la salida del templo y ver la emoción de ellas el día de la procesión, me llamó muchísima atención, se pusieron todas delante de la Virgen y les cambió la cara", comenta Carmen.
