lunes. 06.05.2024

Una cita cuyo objetivo es impulsar el espíritu cooperativo entre las nuevas levas de profesionales del campo, enseñarles cómo trabajar sus explotaciones, cómo vender mejor sus productos y, de paso, promover el relevo generacional en el sector. Precisamente en esto último, La Solana reina como el municipio con mayor incorporación al campo de toda la región, circunstancia que ayuda a fijar población y a garantizar su rejuvenecimiento, un diamante cuando hablamos del mundo rural.

Ángel Francisco Romero, Juan Antonio Martín-Zarco, Francisco José Serrano y José Ramón Lara fueron los cuatro jóvenes solaneros presentes en el campus. Asistieron para aprender y aprendieron. “Nos han enseñado a defender y vender mejor nuestros productos, y a fomentar el uso de las cooperativas porque te ayudan a abrirte las puertas al mercado exterior”, nos dicen. “Las cooperativas son futuro”, aseguran.

Hablando con ellos, nos damos cuenta de que tienen las ideas muy claras. “Queremos ser agricultores por seguir la tradición familiar, pero también porque nos gusta el campo y porque puede ser un oficio rentable”. Niegan que la agricultura sea una ocupación antigua o pasada de moda. “Ni mucho menos, el campo mola”. “Tenemos la última tecnología y defendemos los productos que da nuestra tierra”.

"HAY QUE AFINAR MUCHO PARA RESISTIR"

 Ramona Vinuesa es ganadera profesional. Lleva años gestionando una explotación ovina en La Solana junto a su hermano y reconoce que hace falta audacia para trabajar con ganado en los tiempos que corren. “Hay que afinar mucho para ganarse la vida con la ganadería hoy en día”. “Los productos están al precio de la lonja y se difícil sobrevivir”. Pero Ramona es tenaz. “Llevo luchando desde los 15 años y no queda otra que seguir tirando”. El campus le sirvió –dice- “para aprender cosas que no sabía y que intentaré aplicar en el día a día”. 

La Solana lideró el VI Campus de Jóvenes Cooperativistas