viernes. 26.04.2024

El Manzanares Fútbol Sala Quesos El Hidalgo logró el pasado sábado una victoria agónica ante un sólido Industrias Santa Coloma (4-2) que vendió muy cara la derrota. Los hombres de Juanlu Alonso consiguieron tres puntos vitales e imprescindibles en su lucha por la salvación con dos goles en el último minutos, después de asediar la portería de un gran Borja Puerta en el tramo final.

La primera parte fue de claro dominio visitante. Los pupilos de Xavi Closas asfixiaron a los manchegos con su presión y dispusieron de buenas ocasiones de gol para inaugurar el marcador. El primer tanto llegó en el ecuador, obra de David Álvarez, uno de los jugadores más destacados. Los colegiados señalaron una falta al borde del área y el capitán colomense no perdonó. Dos minutos antes, Cardona estrelló el esférico en la madera de la portería defendida por Antonio Navarro.

Matamoros, en un claro penalti de Khalid sobre el incisivo Juan Emilio, puso las tablas en el 15. Lejos de venirse abajo, los catalanes siguieron apretando y encontraron la recompensa con un gol de Uri Santos a tres minutos del final. Poco después, David Álvarez disparó al palo y en la siguiente respondió Cortés, en una contra, también estrelló el balón en la madera.

El guión cambió por completo en la segunda mitad. El Quesos El Hidalgo, necesitado de los tres puntos, subió líneas y fue encerrando poco a poco a los de Santa Coloma en su área. Sin embargo, el gol no llegaba por la falta de puntería y el acierto de Borja Puerta. El palo, de nuevo, evitó el empate de Daniel en el 25. La jugada polémica del partido llegó ocho minutos después. Hubo de todo. El Manzanares reclamó un penalti sobre Galle Rodríguez; Santa Coloma rozó el 1-3 en la contra; y lo que llegó fue el empate de Cortés, tras un gran pase de Daniel. Los catalanes reclamaron que los manchegos no tiraran el balón fuera al quedar tirado fuera de la pista uno de sus jugadores. Los colegiados expulsaron a Uri Santos por protestar.

El Quesos El Hidalgo, espoleado por su incansable afición, no aprovechó el juego en superioridad y todo acabó por resolverse en el último minuto. Con Galle Rodríguez de cinco, tras la salida de la pista de Raúl Campos por lesión, llegó el 3-2: Matamoros puso un centro-chut que Povill introdujo en su propia portería. Antoñito, a falta de cinco segundos, redondeó este triunfo vital con un gol desde su campo.

Victoria agónica (4-2)